La menta como remedio natural, tiene propiedades carminativas, es decir, reduce cólicos o flatulencias, además es antiespasmódico, se utiliza para combatir las contracturas o calambres en el cuerpo.

Además sirve para aliviar dolores de cabeza, resfriados, gripes o náuseas. La menta es un remedio calmante y refrescante.

Para los dolores de cabeza intensos y la congestión nasal, una gota de aceite esencial de menta diluida en unas gotas de aceite base (como aceite de oliva, girasol, etc) se puede masajear en las sienes y la frente.

También se pueden moler hojas de menta fresca en un recipiente y verterlas sobre agua hirviendo para obtener un vapor que despeje las vías respiratorias.
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Beber una taza de té de menta fresca después de una comida pesada ayuda a reducir la pesadez.

El té de menta alivia el malestar estomacal.

No se recomienda en caso de acidez de estómago

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Fuente: The handmade apothecary.